viernes, 31 de agosto de 2007

En las tardes fumo pues me conmueve el frío. En la esquina donde pudren alhelíes tomo asiento y observo el temor humano por la pertenencia. Asombroso cuando transeúntes, alertagados frente a una posesión, conocen nuestros movimientos.

La gota ya no alivia escarlata, al ojo poco le importan condiciones cromáticas impulsadas por barbarismos en nuestra replana. Persecución para el rapaz, amante de otras floras. Son los dedos el rodillo amarillento de esta fábrica, maquinas enrolladoras, locomotoras en el parque ... y el papel de liar, oh, diáfana pulcritud de los menesteres, desvarío a diario!.

Los desconocidos califican y hablan cuando nos cruzan, y mirando hacia abajo, temerosos por su inversión, sienten la fragancia de africanas esencias. Luego, lejos , repiten las clases de colegio, la orientación benéfica del educando, mienten cuando dicen que no podían respirar, que lo evitaban.

Fumamos en un lugar con nombre de virgen. No somos amigos exactamente, somos gente en general, todos hemos llegado necios o ciegos alguna vez.

jueves, 30 de agosto de 2007

Relativo


Entre los cuerpos celestes existe un respeto magnánimo, como el latino que siempre llora, conmovido por el azar o la intuición. Podría ser algo más, algo intenso que crece y finaliza en la gota pendiente de un hilo. Podría ser algo menos, algo externo que se comprime y caduca ante los ojos, extorsionándolos.
La solución es la fosa individual, el aislamiento meritorio de la locura. Sí, se trata de encierro, de lo no recomendado para la piel y la crítica, para el entorno que diferencia y clasifica.

Violencia nos distinguirá, sabiduría e historia nos apoyarán. Nuestro caso es la antorcha, ir, ir a ver, ver e irse. En un acto cualquiera el pasado influye y dicta sentencias, como el tropiezo de una gran nación debido a un pequeño pueblo. Aquí nuestros niños también juegan con pistolas, mas en zonas mediorientales las estudian, ensamblan y veneran, pues vivirán de ellas. En su cultura no existe el miedo si hay un objetivo.

Acá arma somos, pensamos balas, el proyectil que choca y se desusa, mientras en palacios la pistola descansa y apunta por la ventana esporádicamente.

lunes, 27 de agosto de 2007

Capital del Perú


Lima?Que es eso exactamente?. Hace tanto que no degusto esa fruta, parece que escasean sus cáscaras en las bitácoras y en las carretas, árbol genealógico que da tumbos en la mandarina.

Lima mi madre no usa, no vivo con mamá. Desesperan mis callos, pie en 100 metros planos, un jirón se levanta y camina solo, ciudad colonial que trunca imperios, de lejos ideas ocultan su recelo mientras el movimiento quieto del mundo dibuja ceros . Valor real, Valor legal; entre eso todos andan sin querer, queriendo, codiciando, tristes los que luchan desde extrínsecas trincheras, pensamiento que no sobrepasa palabra... los destrozos no reclaman. No se agrupen, no encapuchen su pensar antes de expresarlo. Ninguna ideología crea urbes ni brinda ubres al hambriento.
Yo no alimento al prejuicioso, imposible prejuzgar textos.

sábado, 25 de agosto de 2007

Servernoia

Desde todo ángulo me miran, ojos duplicados tras una mesa, debatiendo un soliloquio. Suspensivos los pasos de la tardía benevolencia, el águila de quinto piso que no mira el lago, que no regurgita. Avanzada la tecnología que encarcela, que vigila mediante desdoblamientos cual sedante gatuno, que reemplaza progenitores a la hora del cuento.

Ellos son Dios en un perímetro de 200 metros cuadrados, cuando cruzan la puerta, al accionar botones rojos en supresores de picos. Acepto mi culpabilidad de ser mortal humano en este edificio ya que no debería estar acá, siendo pseudo ser visual cercano a la imagen y desligando la palabra de los libros.
Las redes atrapan peces, los peces siguen logaritmos día a día, se advierten entre ellos de estos peligros pero a los segundos olvidan. Las redes vigilan diálogos, caen en suposición pues odian el movimiento, la moción de cualquier sujeto. Espero entretenerlas un poco si están ahora sobre mi, durante el golpe de teclado, pues siempre produzco y no atraso sus ciclos. Ahora, solamente con un silbido moro en el oído, pierdo el fondo y la figura, caigo en confusión causada por mecanismos cotidianos que ya pasaron a lugar trivial.
Cuando la vigilancia desciende, cuando el águila se posa en segundas ramas y no en cúspides, cuando Dios se acerca a la puerta sin intenciones de salir, siento que me mira como si yo ignorara que también antes me miraba.

viernes, 24 de agosto de 2007

Piedra Jabón

Ayer creí haber perdido la pipa de cerro azul. Ayer, sentado en un millar de veredas, subyugado por la lluvia y por la importancia de una fecha con sentido, una flecha consentida, me puse de pie imposibilitado de memorias a corto plazo. Además, las patrullas creadoras de molestias llegaron en busca de luciérnagas desinteresadas de la vida y me pasaron por alto pues uso zapatos y camisa, sin saber que en mis bolsillos siempre hay más de lo que buscan. Mientras me alejaba con las manos en los bolsillos sentía la presencia de aquel objeto entre hilachas díscolas, el lado rebelde de cualquier prenda.
Desempaqué al llegar a casa, dispuesto a dormir a Morfeo con el zorrillo herméticamente encarcelado. Encontré al zorrillo pero no su recipiente lítico, una bella consejera dijo"Anda,búscala, seguro esta en el millar de veredas, debajo de una banca, la carne de porcino hace olvidar, crea apuros". No fui, di por perdida la pipa de cerro azul, al menos el zorrillo estaba conmigo, el paso anterior de la materia prima. Recordé sin melancolía cuando recién adquirí mi pipa, las ventanas cerradas en el cuarto más pequeño de la casa durante un duchazo pre-mar, al salir pocos ignoraban perfumes pero todos tenían su misterio, su pareja comprensiva, su espejo abierto. Afortunados días, afortunado yo: el invitado. Con el tiempo, accidentes evitables fragmentaron ese objeto, pero igual salvaba la vida el recipiente lítico aunque ductos ya no existieran y labios ajenos se acostumbraran lentamente... después de evocar me resigne al papel, al diáfano arroz.
Hoy, saliendo al trabajo, sentí una piedra en las mangas : recipiente lítico, cerro azul que aún me sigue. Admito que me alegró un poco, de haberlo sabido me hubiera levantado más temprano para reunirla con el zorrillo en un desquite de parientes separados. Ya habrá tiempo.

jueves, 23 de agosto de 2007

23 = 7



En futuros lejanos y peligrosos se plasma una equivalencia incoherente. Sigan todos en su rutina pues es muy posible que choquen con ella en una de esas casualidades que solo las películas plantean, quiza la consideren ilegal, colorida, derroche, de marginal. En fin, sólo en mi existe su rastro, la señaletica que respetó para llegar a aquel punto futuro que desconozco. Hace 24 meses yo establecí un futuro, la trocha improvisada que libera el follaje pero no el arbusto, protección del accesorio bello y no del usuario que algo busca esconder.

23 es igual a 7 : la adicción bequeriana de cualquier enamorado, de la segunda vocal, de la simetría de una lenteja. En cualquier capítulo de cualquier novela que mencione una boca estaré.
Hoy es igual a ese futuro lejano y peligroso. En una fecha que ni en aproximaciones recuerdo, un uniforme no compartió la idea que siempre es 23(peligroso) pocos saben que incita un crimen parietal(hoy).